Zygmunt Bauman y John A. Paulos debaten sobre la sociedad desinformación en un coloquio organizado con motivo del aniversario de la colección científica «Metatemas». Xavier Marzal ha asistido a la conversación y hace la crónica a la Nube.
La colección «Metatemas» de la editorial Tusquets cumple 30 años, y la ocasión se ha celebrado con un ciclo de cuatro debates de reflexión sobre la ciencia, repartidos entre Madrid y Barcelona, con presencia de primerísimas figuras. El último de estos cuatro coloquios tuvo lugar en el auditorio de la biblioteca Jaume Fuster. Y los dos ponentes eran, sin duda, de alto vuelo: el sociólogo Zygmunt Bauman (Poznan, Polonia, 1925), conocidísimo analista de la posmodernidad y padre intelectual de la idea-ya casi estrujada- la «modernidad líquida» , y el matemático John Allen Paulos (Denver, EEUU, 1945), denunciador de muchas de las falacias argumentativas con base numérica en que incurren a menudo los medios de comunicación-y quizás ya buena parte de la población-.
Entraron en acción Bauman y Paulos. ¿Caminamos hacia una sociedad de la desinformación? Esta era la pregunta motivadora del acto. Como suele ocurrir en este tipo de debates, no puede decirse que expusieran ninguna teoría ordenadamente, ni que sus intervenciones tuvieran un hilo conductor claro. Pero ya se sabe que un acto de este tipo no es el formato adecuado para estas exposiciones. El interés de estos debates radica en captar las chispas intelectuales que pueden brotar en cualquier momento. Y hay que decir que Bauman, casi nonagenario, hace saltar estas chispas constantemente.
Sobre internet: es una cámara llena de ecos, una casa de espejos, porque en realidad tiende a leer sólo lo que nos satisface, lo que manifiesta las ideas que ya profesamos, queremos escuchar fundamentalmente lo que podríamos haber dicho nosotros mismos.
Sobre Facebook: el éxito del invento de Zuckerberg consiste en haber entendido necesidades humanas muy profundas, como la de no sentirse solo nunca (siempre hay alguien en el planeta que puede ser «amigo» tuyo) y vivir en un mundo virtual donde no hay dificultades ni riesgos (no hay discusiones, las rupturas son sencillas y pasan rápidamente al olvido, todo es infinitamente más soportable que en la vida real).
Sobre el sistema educativo: antes cada sociedad tenía claro cuál era el modelo de «buena persona», de ciudadano ideal, y la educación encaminaba a acercar al alumno a este ideal. Pero, ¿cuál es el ideal ahora? Nadie tiene claro cuál sería ese ideal, porque en realidad vivimos en una sociedad que no cree en ideales ni en dogmas: en consecuencia, la educación no sabe qué hacer, y fracasa. Para sobre el tema, en este video.
¿Y el tema del exceso de información? ¿Caminamos hacia la sociedad de la desinformación?
Ah, de eso prácticamente ni se habló. Quizás tanto Paulos como Bauman dan por hecho que sí, que tenemos demasiada información al alcance. Que no hay manera de digerirlo todo. Eso sí: no toda la información tiene la misma calidad. Y la que dieron estos dos pensadores, como toda la que da «Metatemas», es materia de primerísima calidad.
Traducido por Santiago Pardilla del catalán al castellano. Fuente: nuvol.com (en catalán)
Me ha gustado muchas de las breves reflexiones que encontré en este escrito (lo compartiré). Por otra parte, yo también me tomé la tarea de diseccionar mi constante necesidad de usar las redes sociales, y surgió este ensayo: http://jsaaopinionpersonal.com/2013/06/04/red-social/
santiago es especialista en todo eso??
Más que especializado, debería haber puesto formado en… Solucionado. Un saludo Martha.
Con excepción de lo relativo a la soledad y fb, el autor se limitó a puros lugares comunes. El artículo no refleja en nada el nivel del debate.
el que cree que por que está conectado a Facebook no está solo es un tonto. Si no existe el intercambio persona a persona, la AMISTAD no existe
Bastante interesante la exposición del gran sociólogo Zygmunt Bauman, de gran calidad y con una vision de prudencia y humildad y cien por-ciento humanista.
Discrepo un poco en alguna cuestión , pero en general está acertado .
Te da voz más allá de tu círculo de amistades , conoces cosas y gente que de otro modo sería casi imposible , tienes el control , cuando te comentan sientes satisfacción por el hecho de que alguien te ha dedicado su tiempo , te ha leído.
Sin enrollarme más es una herramienta positiva para algunos momentos , siempre y cuando Tu vida no gire exclusivamente de el.
Si asi fuese por muchos millones de ciberamigos que tuvieses estarías solo
Las máquinas nos ayudan , rompen el hielo pero no deben sustituir la relación personal.
Anda que no me he puesto filosófico , pero ahí queda eso