Es un pensamiento liberador. Puede ser aplicado a tantos ámbitos, no sólo al político. De hecho todos están entrelazados, la política, la vida privada, la familia, la educación…Pienso en casos de víctimas de violencia y abuso de cualquier tipo que se quedan con la sensación de culpa por haber sido demasiado débiles, vulnerables. Y el proceso me resuena a la deconstrucción de Derrida aplicada a la psicoterapia.

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