“La crisis de 2008 ha propiciado un aumento desmesurado en los últimos tiempos de casos de fraude, morosidad, e incluso sabotaje dentro de las empresas. Cada vez son más las que contratan los servicios de un detective para investigar a sus empleados o clientes en búsqueda de información.
Los detectives privados de Barcelona lo saben muy bien. Es una de las localidades de España donde con más frecuencia se recurre a este tipo de agencias cada año, debido a la alta concentración de empresas. En los últimos años este negocio ha experimentado un crecimiento en toda España de hasta un 60%.
Actualmente hay unas 1500 investigaciones en activo y cerca de 2800 licencias emitidas. Para los centros educativos, este hecho no ha pasado desapercibido.
Por ejemplo, los futuros detectives de Barcelona ya pueden acceder a formación específica en este campo. Según el Collegi Oficial de Detectius Privats de Catalunya, cada año aumenta el número de estudiantes y abarcan más franjas de edad. España es además el país más exigente de la Unión Europea tanto en el ámbito formativo como en la regulación del sector. La mayoría de los que se dedican a esta actividad suelen tener estudios de criminología o peritaje de caligrafía, entre otras especialidades.
No cabe duda de que en la actualidad la imagen que se tenía de estos profesionales ha experimentado un gran cambio, sus actuaciones ponen de manifiesto su importancia a la hora de luchar contra la corrupción, y suponen un desahogo económico para muchas empresas que sufren los efectos de la picaresca que la crisis ha traído consigo.”