El Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) realiza mensualmente, salvo agosto, barómetros de opinión, con o sin intención de voto, donde puede entreverse directa e indirectamente el parecer de los ciudadanos respecto a algunas cuestiones habituales sobre la situación socioeconómica y política de España. Estos barómetros se realizan sobre una muestra proyectada de 2500 entrevistas (ver ficha técnica) que se reduce en no más de 50 y queda habitualmente en torno a los 2470 entrevistados.
Ninguno de estos barómetros es utilizado para pronosticar la distribución de los 350 escaños en el Congreso de los Diputados, por varias razones, siendo la principal que el tamaño de la muestra es insuficiente para tal propósito.
Tampoco puede elevarse sin más criterio el número de entrevistados en el muestreo para pronosticar la distribución de parlamentarios por partidos políticos en el Congreso, ya que de hacerlo así nos encontraríamos que Madrid y Barcelona tendrían mucha representación en la muestra, mientras provincias como Soria, Palencia, Albacete, Cuenca, etc. estarían escasamente representadas. El hecho de que los diputados se asignen provincialmente (ver tabla 1) obliga a tener muestras estadísticas mínimamente fiables para proyectar la distribución de escaños provincialmente.
El último estudio del CIS de estas características data de octubre de 2011 (ver tabla 2) y entrevista a 17.194 ciudadanos mayores de 18 años y más distribuidos provincialmente como se recoge en la tabla 3. Esto supone diferentes errores muestrales (acordes al tamaño de la muestra) y, naturalmente, un elevado coste en la recogida de la información, más cuando en el caso del CIS las entrevistas se realizan personalmente en los domicilios con encuestadores del CIS.

Tabla 3. Puntos de muestreo provinciales, entrevistas, error muestral y coeficientes de ponderación

Aún así, o sea con una buena muestra representativa a nivel provincial realizada explícitamente para pronosticar la distribución de escaños, nos encontramos con un problema sobrevenido típico de los sondeos electorales: alrededor de uno de cada cuatro encuestados no declara voto directo, lo que dificulta la proyección y obliga a trasformar este voto no declarado en voto probable (lo que se conoce coloquialmente como ‘la cocina’), debilitando el pronóstico demoscópico final cuando se ‘cocina mal’.
Estas observaciones preliminares tienen como objetivo delimitar el campo de proyección electoral y contextualizar el complejo y costoso proceso de análisis electoral que conlleva una proyección demoscópica rigurosa. Lo hacemos en el propósito de advertir al lector interesado y meticuloso que una estricta distribución de diputados en el Congreso obliga como mínimo a cumplir estos requisitos para que tal pronóstico se ajuste científicamente a los patrones exigidos en sociología electoral o en estadística predictiva. Esta advertencia es de interés ante la cada vez mayor presencia de encuestas de opinión pública en los medios de comunicación. Así, en España proliferan los barómetros mensuales o trimestrales publicados en domingo (más afluencia de lectores y mayor impacto en opinión pública) por los grandes periódicos, desde el punto de vista de sus potenciales lectores: El País, El Mundo, ABC, El Periódico, La Vanguardia y La Razón, donde distintas empresas demoscópicas presentan sus estudios mensuales y/o trimestrales (Metroscopia; Sigma Dos; Feedback; Gesop; etc.) sobre muestras que suelen estar en torno a los 1000 entrevistados (vía telefónica), se elevan algo más en períodos cercanos a las citas electorales. Habitualmente estos análisis tienen que ver con la intención de voto y la consulta sobre temas candentes de actualidad (independencia de Cataluña, la LOMCE, jubilaciones, etc.). y casi siempre de intención de voto.
Cuando es así, no hay problemas en los pronósticos. Sin embargo, los medios de comunicación arriesgan y olvidan estos requisitos o prefieren ser menos estrictos en aras de la noticia y proyección informativa, proyectando un hipotético Congreso de Diputados con escaños previsibles de los partidos políticos. El caso más reciente lo encontramos en el sondeo realizado por Feedback para La Vanguardia del domingo 8 de septiembre y el realizado por Gesop para El Periódico publicado el domingo 9 de junio de 2013. Los resultados figuran en los gráficos adjuntos. Más allá de las notables diferencias entre ambos pronósticos, que pueden atribuirse a dos momentos diferentes en el tiempo, ninguno cuenta con muestra suficiente que acredite la rigurosidad, veracidad o probabilidad del pronóstico. De tal forma que la previsión de distribución de escaños no puede hacerse directamente por provincias al carecer la muestra de representación provincial, y en ningún momento se advierte de que la proyección obedece a otra opción metodológica que pasaría por traducir la proyección de intención de voto en representación política parlamentaria. Esto es un riesgo más que evidente y posiblemente magnifica la presencia de IU y UPyD que siempre pierden representación política por efectos de la aplicación de la Ley D’Hont provincialmente y no bajo una hipótetica circunscripción estatal inexistente en España que entonces sí podría acercarse al pronóstico presentado en La Vanguardia y El Periódico.
La Vanguardia (domingo, 6 de septiembre de 2013)
FEEDBACK: 1.500 entrevistas telefónicas (realización: 2/6 septiembre de 2013)
Fuente: [Enlace retirado]
El Periódico (barómetro político de verano)
GESOP: 1.000 entrevistas telefónicas (realización: 25/28 junio de 2013)
Fuente: [Enlace retirado] –[Enlace retirado]
Conclusión
Es incierta e improbable una proyección de distribución de escaños en el Congreso de los Diputados en España a partir de la aplicación de sondeos electorales con muestras estatales. Sólo muestras representativas de nivel provincial permiten obtener una distribución de diputados aproximada y, en estos casos, siempre quedará limitada por ‘la cocina’ y el momento en que se realiza el sondeo, cuanto más próximo a la cita electoral más probable y verosímil es el pronóstico emitido.
Artículo de Leopoldo Cabrera, columnista de este blog.