
Después de un verano de cifras sobre invasiones, amenazas y robos de puestos de trabajo, todos, actos protagonizados por los inmigrantes clandestinos, según el discurso oficial del estado español, se podría decir que Octubre está siendo el mes de la inmigración. A escasos días de que finalice el mes, continúan los acontecimientos de la valla de Melilla de trasfondo, con el debate abierto sobre la legalidad de las devoluciones en caliente que allí se producen. Continúan los naufragios en las costas españolas e italianas mientras se celebraba a principios de mes, el triste aniversario del naufragio en las costas de Lampedusa que se tradujo en la muerte de 368 personas.
Un año después de este acontecimiento y de un verano de los más activos, la Unión Europea ha puesto en marcha bajo la coordinación del Ministerio del Interior de Italia, la operación Mos Maiorum. Una operación que bajo el lema de la lucha contra el crimen organizado, pone en practica formas de actuación racistas totalmente contrarias a la Declaración Universal de Derechos Humanos tal y como se refleja en la nota de la presidencia del Consejo de la Unión Europea.
Esta operación que se lleva a cabo entre los días 13 y 26 de Octubre, tiene como objetivos:
- Reunir información sobre las formas de llegada de los inmigrantes “irregulares”
- La persecución de las organizaciones del crimen organizado
- Conocer su modos operandi y el estado de la cuestión para actuar sobre ellos (Organizaciones criminales)
- Consolidar medidas para reducir el impacto de la inmigración “ilegal” (refiriéndose en la gestión de fronteras)
- Controlar todas las rutas de inmigración “ilegal”
- Recabar información para categorizar movilidades secundarias
Unos objetivos que reflejan el mantenimiento del discurso tradicional que desde la Unión Europea se hace sobre la inmigración: continúa utilizándose la palabra “ilegal”, reduciendo la condición de inmigrante a una formalidad administrativa, se centra en el control de las fronteras y en el impacto de la inmigración en los mismos, y no en las personas.
Se trata de una operación que se realiza bajo medidas racistas o xenófogas porque la forma de recabar la información, como se detalla en el propio documento, es la de detener a las personas sospechosas de ser inmigrantes ilegales en cualquier lugar y pasarles un cuestionario, guiándose únicamente por el aspecto físico para determinar si una persona puede ser inmigrante clandestina o no.
Araceli Manjón-Cabeza, profesora de Derecho Penal en la Universidad Complutense de Madrid, señalaba en la edición del 23.10.14 del diario El País que como resultado de la operación Mos Maiorum en España, estamos conociendo casos de detenciones de sin papeles que acaban en expulsión en apenas 40 horas. Van a buscar a los que tienen fichados por tener orden de expulsión; no los llevan a un Centro de Internamiento de Extranjeros, lo que supone que no hay orden judicial de internamiento; los meten en los calabozos de la Brigada de Extranjería. De ahí, en pocas horas, a un avión especialmente fletado solo para ellos. Los llaman “vuelos macro”; otras veces los colocan en vuelos regulares.(Artículo completo)
Javier de Lucas, Catedrático de Filosofía del Derecho en la Universidad de Valencia, en línea con estas afirmaciones, señala en el blog alrevésyalderecho.com que se trata de una redada que mantiene el “discurso de la xenofobia institucional”.
Mos maiorum significa en latín “ las costumbres de los antepasados”, un significado que no encaja con los objetivos de este operativo, que actúa sobre la posibilidad de libre movilidad del individuo. La Unión Europea suele recurrir al latín para nombrar los diferentes operativos en materia migratoria realizados en los últimos años, como la operación Mare Nostrum que se activó tras la tragedia de Lampedusa, en la que el propio ministro de Infraestructuras y Transporte en Italia, Mario Mauro señalaba que se trataba de un operativo de “vigilancia y socorro”, en el que la mayor inversión se realizaba de nuevo en tecnología y material para el control de las fronteras.
Desde Amnistía Internacional se pone de manifiesto con cifras, la intención de este tipo de operativos. Si analizamos los fondos presupuestados para llevar a cabo estas operaciones desde que se creara FRONTEX (Agencia Europea para la Gestión de la Cooperación Operativa en las Fronteras Exteriores de los Estados Miembro de la UE) en el año 2005, observamos como la mayor parte de estos se ha destinado a medidas de control de fronteras, frente a las medidas de integración, retorno o refugiados, un indicador de la verdadera preocupación de la UE en materia de migraciones.
Los datos ponen de manifiesto que España ha sido la principal receptora de estos fondos seguida de Italia para el periodo entre 2007 a 2013. (Informe completo de Amnistía Internacional disponible aquí)
Muchas han sido las manifestaciones desde organizaciones políticas y ONG´s que han manifestado el total rechazo a esta redada, pero tendremos que esperar a que finalice la operación Mos Maiorum el día 26 de Octubre para conocer los primeros datos sobre las consecuencias de este operativo que apunta a que la seguridad y la criminalización de la inmigración clandestina sigue siendo el discurso de la Europa fortaleza.