Por lo general, cuando se aborda el tema de reformar o transformar el sistema educativo nacional, se toman algunas variables con sus respectivos indicadores, resultados de diagnósticos e investigaciones realizados por especialistas en la materia. El estudio bibliográfico y de campo se efectúan con el objetivo de ser precisos y acertados en la mejora de la calidad de la educación.
En la revisión de la bibliografía sobre la educación encontramos diversidad de enfoques educativos, numerosas experiencias extranjeras de cómo teóricamente mejorar la calidad de la educación, además de ponencias y discursos de especialistas. La pregunta es ¿Por qué, si hay tanto saber y conocimiento, no se mejora la educación?
La otra pregunta es ¿Por qué cuando se hacen reformas, no funcionan como teóricamente fueron elaboradas? A dónde se encuentran las explicaciones del por qué, no se resuelve el problema, sino, lo contrario, cada vez se empeora. No obstante, los Ministros de Educación cuando toman posición de su cargo prometen mejorar la educación, pero la dejan en peor estado, de cómo la encontraron.
Podemos encontrar posibles causas, por ejemplo, la reforma fue mal diseñada, la incompetencia de los funcionarios públicos, enfoques y paradigmas no apropiados a la realidad nacional, falta de presupuesto, corrupción, etc.
Desarrollo expositivo-argumentativo
Las reformas y transformaciones de las estructuras sociales pueden ocurrir por varios factores, por ejemplo, presión popular, apertura de los grupos de poder económico para que el poder político realice algunas modificaciones cosméticas permitidas en la superestructura de la sociedad.
El problema no es realizar una reforma o transformación educativa, si el poder político y económico está concentrado en los grupos de poder, entonces, primero se requiere transformar el modelo económico, a través del poder político emanando de los partidos y del movimiento social. Es difícil que los cambios en la sociedad tengan su génesis en los grupos de poder económico, porque son precisamente ellos lo que se oponen a que existan condiciones favorables a la ciudadanía. Los grupos de poder se interesan por la existencia de una democracia formal.
La democracia formal es la versión virtual de lo real, donde el sistema te hace creer que habitas en una democracia formal, porque existen instituciones públicas, en particular asilos, orfanatos, hospitales, centros educativos públicos, partidos políticos de diferente ideología, religiones de diversas denominaciones, procesos electorales habituales para “elegir” a través del sufragio a funcionarios en cargos de elección popular, medios de comunicación, etc.
La democracia virtual es una especie de holograma que lo observas, pero compruebas su existencia, cuando por el potencial usuario por necesidad requiere los servicios públicos, y se conviertes en fuente primaria que puede dar fe, que los servicios que prestan las instituciones públicas son ineficientes y el personal es inepto.
Las instituciones del Estado al disfuncionar prácticamente a nivel general, estamos ante una corrupción institucionalizada. El sistema educativo es una de las instituciones más importantes de la sociedad, porque es el centro donde se forman los ciudadanos del presente y del futuro. Sin ánimo de ser simplista, por lo general los sistemas políticos no democráticos poseen un sistema educativo corrupto y de baja calidad, en donde, en lugar de formar buenos ciudadanos, producen delincuentes para engrosar las pandillas juveniles y hacen subir las estadísticas de los emigrantes hacia los Estados Unidos y a países europeos.
Los sistemas educativos corruptos poseen alta eficiencia en promociones automáticas de un grado a otro, de un ciclo a otro, hasta llegar al punto de crear inflación en grados y posgrados académicos, que, en resumidas cuentas, por el bajo nivel académico esos “profesionales” se pueden tipificar como obreros calificados, que incluso llegan a ocupar altas posiciones en la función pública, hasta ser Ministros de Educación.
La inflación de profesionales, se ha convertido en una “titulitis aguda”, constituye la nueva versión del ejército de reserva del capitalismo, a los grupos de poder económico, le conviene convertir a las nuevas generaciones de profesionales universitarios en objetos, dispuestos a trabajar por salarios de obreros, por ejemplo, en las universidades como docentes, investigadores y administrativos, en las fábricas como gerentes, administradores, directores, etc.
La lógica de los grupos de poder económico si sitúa en los albores de la Revolución Industrial, cuando se creía que a ínfimo salario era igual a más ganancia, sin tomar en cuenta, que a mayor salario aumenta la capacidad de compra de los trabajadores, lo que hace incrementar la productividad y la recaudación de impuestos. Asimismo, es una manera de disminuir el desempleo, la delincuencia, la emigración y mejoran las prestaciones de servicio de las instituciones del Estado.
Una excelente calidad de la educación es incompatible con sistema políticos no democráticos, porque estaría formando estudiantes con capacidad de resolver problemas, críticos y competentes de generar cambios positivos con incidencia, en la ciencia, tecnología, economía, cultural, social, político, etc. El estado crítico del sistema educativo es una cuestión estructural que tiene que ver con las estructuras de poder económico. En los países no democráticos el grupo de poder que tiene el poder económico también por lo general detenta el poder político.
La base fundamental de la democracia, del desarrollo social y del crecimiento económico es la educación. Para conocer el índice de bienestar de una sociedad es importante el conocimiento de la calidad del sistema educativo nacional, si éste es ineficiente, se infiere que la corrupción tiene rango de política de Estado. En el sistema educativo nacional es donde se forman los diferentes profesionales que están al frente de toda la institucionalidad del Estado, por ejemplo, en los tres Poderes del Estado, qué clase de diputados legislarán, qué nivel de Ministros se tendrá, qué probidad de los funcionarios del Poder Judicial, etc.
Cuando los grupos de poder económico oligárquicos controlan el aparato del Estado, estamos frente a un gobierno de derecha y obviamente con un modelo económico neoliberal. La democracia y el nacionalismo son incompatibles con el neoliberalismo, porque es dañino a la cultura, a la soberanía nacional y a la autodeterminación del Estado.
La principal tarea del sistema educativo nacional es convertirse en una guardería para jóvenes, en donde el objetivo principal es mantenerlos depositados, para alienarlos, desnacionalizarlos y convertirlos en apáticos a su propia realidad. Al final, todos pasarán de grado y todos se graduarán, el éxito de la educación lo fijan por la cantidad de jóvenes graduados y del número de profesionales.
Existe un excedente de profesionales que trabajan en las maquilas, calls centers y en el sector informal, varias empresas extranjeras al conocer el bajo nivel educativo de los profesionales que se gradúan en el país, prefieren contratar a profesionales extranjeros para los cargos de gerentes y directores. Por tal razón, algunas oligarquías latinoamericanas deciden mejor crear su propia universidad para contratar en sus empresas profesionales con un aceptable nivel académico.
Conclusiones
A los grupos de poder económico no les interesa que exista un elevado nivel del sistema educativo nacional, porque formará personas que pensarán y no permitirán que se sigan cometiendo injusticias contra la población, serían personas que defenderían sus derechos contra las estructuras violadoras de los derechos humanos.
Asimismo, varias universidades tendrían que cerrar, por ser literalmente centro comerciales o malls de la educación, de igual forma, será imperativo depurar a los funcionarios públicos que permitieron, toleraron y formaron parte de la corrupción del sistema educativo nacional, se acabaría la inflación de titulados universitarios, porque se terminaría la “venta” de títulos de varias universidades privadas. Sin embargo, el primer paso para realizar estos cambios, pasa por cambiar el modelo económico neoliberal y la existencia de un gobierno realmente democrático.
La cuestión es lograr un crecimiento y desarrollo no centrado en una elite económica, sino en la amplia mayoría de la población, con una distribución justa de la riqueza. El nivel académico de la educación no es un hecho aislado ni una parte de un todo, es un eje transversal, que se relaciona con todas las estructuras de la sociedad, la educación no se puede reformar o transformar, sino se realizan los cambios a nivel macro.
Esta situación no es una cuestión simplemente ideológica, sino que tiene que ver con la justicia y equidad, hemos observado que existen gobiernos que se hacen llamar revolucionarios y de izquierda, pero lo que hacen desde el poder político son acciones de derecha, incluso van más lejos que los mismos derechistas.
Las ideologías políticas tradicionales se convirtieron en marketing, porque el discurso no se encuadra dentro de las acciones que hacen, da la impresión que la ideología es la misma, y que lo que cambia es la retórica, colores de banderas, género de canciones y consignas etc.
Pregunta: PARA USTED: LE CABE ESTAS CONSIDERACIONES A LA UES????? QUE SE ENCUENTRA ACTUALMENTE EN UNA SITUACION MUY DEBIL, MUY ALEJADA DE LA HONROSA UES DE LOS AÑOS 60-70????? . DANIEL
Estimado Daniel, lamentablemente sus apreciaciones son acertadas, la UES dejó de ser un tanque de pensamiento y conciencia social crítica del pueblo salvadoreño. La UES ante los principales problemas nacionales y regionales no sienta posición, mucho menos hace aportaciones científicas para su solución. Es evidente el rezago ante algunas universidades privadas, lo cual significa mucho.
Estimado Oscar Martínez,,
comparto con usted la argumentación que presenta sobre la relación de la política con el sistema educativo en A.L.. Considero que faltó exponer la otra cara de la moneda, la comparsa del sistema, la que tiene que ver con el servilismo, la sumisión, el acomodamiento, la insubordinación y la satisfacción de los docentes e investigadores que acompañan todo ese proceso de alienación en la academia y con congresos, foros, simposiums, e infinidad de eventos de pasarelas y de pagos para otorgar constancias y certificados que sirven para avalar la simulación del quehacer científico.
En ello también participa el llamado “pensamiento crítico” que simula ser crítico y resulta funcional al sistema.. Son críticos de palabras y sistémicos de hecho. Es un “pensamiento crítico” demasiado domésticado y simulador, que incluso navega con banderas “críticas” en asociaciones latinoamericanas. Por lo pronto los llamaría (sociólogos, antropólogos, filósofos, psicólogos, historiadores, etc) “Pensamiento crítico neoliberal”.
Saludos, Eduardo Sandoval (México).
Estimado Eduardo, estoy completamente de acuerdo con su comentario, es necesario escribir algunas líneas al respecto, porque observamos en algunas universidades latinoamericanas que se realizan encuentros científicos, congresos especializados, etc., que son verdaderos shows de entretenimiento (con honrosas excepciones), los organizan para ganar o mantener el “prestigio” académico, sin embargo, constituyen conocimientos lights que no son dañinos para el neoliberalismo, sino, al contrario lo fortalecen.
Creo que nos hace falta trascender de la palabra a la acción; de la investigación a la transformación; del escribir y describir, a exigir; de la reflexión al compromiso. Muchos discursos, muchos libros, muchas diagnosis versan sobre lo mismo que aparece en el artículo pero no transforman nada. Los escritores de libros son absorvidos, al final de cuentas, por el mismo sistema capitalista neoliberal. Escriben para vender sus ideas como cualquier otra mercancia que adquiere un valor de cambio aunque su valor de uso no deje de ser meramente intelectivo y sin trascendencia práctica. Quisiera que la UES volviera a ser la conciencia crítica que antes fue. Que nuevamente se volviera a eregir sobre sus tres vertebras principales como son: la Docencia, la Investigación y la Proyección Social. Que produjera cerebros como Juan Crisóstomo Segovia, quien diagnosticara por primera vez, hace aproximadamente 104 años (7 de julio de 1913), 4 años después de haber sido descubierta en Brasil la enfermedad de Chagas, producida por el parásito Trypanosoma cruzi que genera la picadura de la chinche y que, junto al Dr. Rafael Antonio Cedillos son muy conocidos en EE.UU. y, lamentablemente, desconocidos en su propia patria que los vio nacer, crecer, desarrollarse y prepararse en la Facultad de Medicina de la Universidad de El Salvador. Por supuesto que hay otros tantos cerebros surgidos de la UES que ameritarían también se les nombre, como el mismo Dr. Fabio Castillo (QDDG), ex Rector del Alma Mater y otros cerebros más que lamentablemente ha robado el imperio porque no solo despoja de los recursos materiales a los pueblos latinoamericanos, sino, también, de grandes cerebros.
No hay que zatanizar a los escritores ni a los investigadores científicos, porque publican su producción intelectual en libros, ponencias o conferencias, etc., tampoco vivir en la conformidad de glorias pasadas, somos la presente generación que debemos retomar la acumulación histórica de la lucha social, para tratar de crear nuevos paradigmas que conduzcan a contribuir positivamente en el cambio social.